LECCIÓN 9. LO QUE LA BIBLIA ENSEÑA ACERCA DEL JUICIO 

 

«Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio, así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan» (Hebreos 9:27-28).

 

Toda la humanidad, tarde o temprano tendremos que comparecer ante el juicio divino, y aunque no queramos daremos cuenta de todos y cada uno de nuestros actos. La Biblia es clara en cuanto a este tema, y seamos creyentes, cristianos, tradicionalistas, incrédulos, paganos o ateos, estaremos delante del Gran Rey del Universo para dar cuentas de todo lo que hicimos cuando estábamos en esta tierra. 


1) ¿Sobre qué hará Dios el juicio? (Eclesiastés 12:13-14) 
 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.  Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala. 
Respuesta: Sobre toda obra buena o mala.

 

2) ¿Cuántos comparecerán ante el juicio?   (2 Corintios 5:10). 

Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.  R= Todos.


3) ¿Quién nuestro Intercesor?  (Romanos 8:34).

¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. Respuesta: Jesucristo.

 

4) ¿Quién el Mediador entre Dios y los hombres?  (1ª Timoteo 2:5).

Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo Hombre. Respuesta: Jesucristo, Hombre.

 

5) ¿Quién es nuestro abogado? (1ª Juan 2:1). 

Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. Respuesta: Jesucristo, el Justo.

 

6) ¿Dónde están registradas nuestras acciones? (Apocalipsis 20:12)

Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.  Respuesta: En los libros del cielo

 

7) ¿Cuáles son esos libros? Cada persona en esta tierra tiene un ángel ministrador de parte de Dios que todos los días registra en los libros del cielo nuestras buenas obras, en el libro de memorias; o nuestras malas obras, en el libro de pecados. Depende de nuestro actuar.

 

EL LIBRO DE MEMORIAS: Delante de Dios está escrito "un libro de memoria," en el cual quedan consignadas todas las buenas obras. Dice la Escritura: Entonces los que temían al Señor, hablaron cada uno a su compañero; y el Señor escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen al Señor, y de los que piensan en su nombre. Y serán para mí especial tesoro, ha dicho el Señor de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve” (Malaquías 3: 16-17). Sus palabras de fe, sus actos de amor, están registrados en el cielo. A esto se refiere Nehemías cuando dice: "¡Acuérdate de mí, oh Dios mío, . . . y no borres mis obras piadosas que he hecho por la Casa de mi Dios!" (Nehemías 13:14). En el "libro de memoria" de Dios, todo acto de justicia está inmortalizado. Toda tentación resistida, todo pecado vencido, toda palabra de tierna compasión, están fielmente consignados, y apuntados también todo acto de sacrificio, todo padecimiento y todo pesar sufridos por causa de Cristo. El salmista dice: "Tú cuentas los pasos de mi vida errante: pon mis lágrimas en tu redoma: ¿no están en tu libro?" (Salmo 56:8). A todos los que se hayan arrepentido verdaderamente de su pecado, y que hayan aceptado con fe la sangre de Cristo como su sacrificio expiatorio, se les ha inscrito el perdón frente a sus nombres en los libros del cielo; como llegaron a ser partícipes de la justicia de Cristo y su carácter está en armonía con la ley de Dios, sus pecados serán borrados, y ellos mismos serán juzgados dignos de la vida eterna. "Yo, yo soy aquel que borro tus rebeliones por amor a mí mismo y nunca más me acordaré de tus pecados (Isaías 43:25).Elena de White: Conflicto de los Siglos, pág. 535 y 537). 

                                

EL LIBRO DE PECADOS O LA MUERTE          

Hay además un registro en el cual figuran todos los pecados de los hombres, el libro de pecados. Está Escrito: “He aquí que escrito está delante de mí; no callaré, sino que recompensaré, y daré el pago en su seno por vuestras iniquidades, dice Jehová, y por las iniquidades de vuestros padres juntamente, los cuales quemaron incienso sobre los montes, y sobre los collados me afrentaron; por tanto, yo les mediré su obra antigua en su seno” (Isaías 65:6-7). "Pues que Dios traerá toda obra a juicio juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala"(Eclesiastés 12: 14). "De toda palabra ociosa que hablaren los hombres, darán cuenta en el día del juicio." Dice el Salvador: "Por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado." (Mateo 12:36, 37).  Los propósitos y motivos secretos aparecen en el registro infalible, pues Dios "sacará a luz las obras encubiertas de las tinieblas, y pondrá de manifiesto los propósitos de los corazones" (1ª Corintios 4:5).

 

El libro de la vida del cordero.

….y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida;  y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras (Apoc. 20:12). Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego (Apocalipsis 20:15). No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero (Apocalipsis 21:27). La pregunta que nos haremos es ¿Quiénes se inscriben en el Libro de la vida del Cordero? Sólo los que concienzudamente obedecieron a Jesús conforme a un “Escrito Está”, se bautizaron, le entregaron su vida y le siguieron en esta tierra.                             


8) ¿Quiénes son los testigos? (Mateo 18:10).

Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos. Respuesta: Los ángeles de Dios que nos ministran diariamente y toman registro de todos nuestros hechos.

 

9) Y al final del tiempo: ¿Quién será nuestro Juez?  (Juan 5:22, Hechos 10:42).

Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al Hijo.

Y nos mandó que predicásemos que él es el que Dios ha puesto como Juez de vivos y muertos. Respuesta: El Señor Jesucristo. 

 

10) ¿Por cuál código seremos juzgados? (Santiago 2:10-12) 
 Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos. Porque el que dijo: No cometerás adulterio, también ha dicho: No matarás. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero matas, ya te has hecho transgresor de la ley. Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad.  
Respuesta: Por la ley de la libertad o los Diez Mandamientos.

 

11) ¿Cuál será la sentencia? (Mateo 25:31-46). 

Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. 
Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.  Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.  Entonces también ellos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos? Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis.  E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

Respuesta: Vida eterna para los que hicieron lo bueno, y destrucción eterna para los que hicieron lo malo.

 

¿QUÉ DEBO HACER?

1) Creer y obedecer a Jesús (Juan 5:24). De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, más ha pasado de muerte a vida.

                                                 

2) Temer a Dios y guardar sus mandamientos (Juan 14:15).

Si me amáis, guardad mis mandamientos. 

                                                                            

3) Aceptar a Jesús como mi Abogado, Intercesor, Mediador y Amigo para que cuando venga como Juez, ya sea que esté vivo o muerto, tenga una esperanza para vida eterna.                                                                              + Así que, no juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido (Mateo 7:1-2).

                                                                                            

“El juicio final es un acontecimiento sumamente solemne y terrible. Se desarrollará delante del universo entero. El Padre ha delegado todo el juicio en el Señor Jesús. El será quien declare la recompensa que recibirán los que hayan sido leales a la ley de Jehová. Dios será honrado y su gobierno reivindicado y glorificado, y ello en presencia de los habitantes de los mundos no caídos. El gobierno de Dios será reivindicado y exaltado en la mayor medida posible. No se trata del juicio de una persona o de una nación, sino de todo el mundo. ¡Oh, qué cambio se producirá entonces en el entendimiento de todos los seres creados! Allí se percibirá el valor de la vida eterna”. [Elena de White. Matinal: Cada día con Dios, 14 de octubre].

 

 

Conclusión: Cristo Jesús vendrá en la gloria del Padre para darnos solo un veredicto: Culpable o Inocente, dependiendo de nuestras obras. ¿Te gustaría prepararte para ese día, entregarle tu vida al Maestro y que cuando venga como Juez de vivos y muertos, te de Veredicto de Inocente? Dios te bendiga.

 

Mi resolución

Acepto a Jesús como mi ABOGADO. Deseo respetar y obedecer los mandamientos de Dios. Firma: ____________