"LA BIBLIA Y LA MENTIRA" (NOVENO MANDAMIENTO)

 

«NO LEVANTARÁS FALSO TESTIMONIO CONTRA TU       PRÓJIMO» (Éxodo 20:16).

 

La mentira y el engaño son sinónimos y cualidades que se le aplican solo a Satanás y a sus ángeles. Por lo tanto, cualquiera que hace mentira o engaño no es de Dios sino del diablo. Y cualquiera que miente tarde o temprano lo descubren. La Biblia declara que los mentirosos no heredarán el reino de Dios.

 

Jesús reprendió a los Fariseos, dirigentes religiosos de aquel entonces, porque no decían la verdad sino mentían a la gente, y les dijo: “Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira” (Juan 8:44).  

 

En el tiempo de la Iglesia cristiana, después de que Jesús se fue al cielo, hubo una pareja que iban a donar la venta de una heredad para la obra de Dios, y extrajeron del dinero de la propiedad, mintiéndole al espíritu Santo. El apóstol Pedro dijo: “Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad, y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles. Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. Al oír Ananías estas palabras, cayó y expiró” (Hechos 5:1-5).

 

El apóstol Juan, por inspiración divina dijo en el libro de revelación, para todos aquellos que no han aceptado la verdad, lo siguiente: “Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y TODOS LOS MENTIROSOS tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda” (Apocalipsis 21:8). “No entrará en la ella (la Nueva Jerusalén) ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y MENTIRA, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero” (Apocalipsis 21:27). ¿De quién crees que viene la mentira o el engaño? “Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos” (Apocalipsis 20:10).

 

Si hay alguna iglesia o sistema que está mintiendo con respecto a la verdad, las Sagradas Escrituras, y no guarda sus mandamientos, sino enseña mentiras ¿De qué lado está? Alguien está mintiendo y engañando a mucha gente linda, enseñando de una forma adulterada los Diez Mandamientos de Dios, y esto es un grande pecado ante Dios. Escrito Está: “El que comete pecados rompe la ley de Dios, porque el pecado es la infracción de la ley” (1ª Juan 3:4). Jesús dijo: “Si me amáis, guardad mis mandamientos” (Juan 14:15). Por lo que, el mismo Jesús reprendió las tradiciones de los hombres porque cuando el hombre guarda las tradiciones invalida los mandamientos de Dios. Y dijo: «“Este pueblo de labios me honra, Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me adoran, enseñando tradiciones humanas como si fueran mandamientos de Dios”» (Mateo 15:8-9 Versión Nueva Biblia Viva). 

 

Se miente, cuando no se le enseña la verdad al pueblo con un “Escrito Está” sino una mezcla de verdad y mentira; se miente cuando se le enseña al pueblo que guarde las tradiciones religiosas en lugar de las Sagradas Escrituras como el domingo (Sunday), las fiestas patronales, las fiestas de todos santos, etc. cualquier tradición que tenga que ver con la adoración de los ídolos en lugar de Dios. 

 

La gracia de Dios sigue vigente y todavía es tiempo de estudiar las Sagradas Escrituras, arrepentirse y aceptar a Cristo como nuestro Único Salvador (Mateo 1:21), nuestro Mediador (1ª Timoteo 2:5), nuestro Intercesor (Romanos 8:34), nuestro Abogado (1ª Juan 2:1), nuestro Sumo Sacerdote ante Dios (Hebreos 4:15) porque al final del tiempo vendrá para juzgar a los humanos en base a un “Escrito Está” o “Así dice el Señor” y ninguna Iglesia nos va a salvar sino solo Jesús. 

 

Dice una autora: “La mentira acerca de cualquier asunto, todo intento o propósito de engañar a nuestro prójimo, están incluidos en este mandamiento. La falsedad consiste en la intención de engañar. Mediante una mirada, un ademán, una expresión del semblante, se puede mentir tan eficazmente como si se usaran palabras. Toda exageración intencionada, toda insinuación o palabras indirectas dichas con el fin de producir un concepto erróneo o exagerado, hasta la exposición de los hechos de manera que den una idea equivocada, todo esto es mentir. Este precepto prohíbe todo intento de dañar la reputación de nuestros semejantes por medio de tergiversaciones o suposiciones malintencionadas, mediante calumnias o 318 chismes. Hasta la supresión intencional de la verdad, hecha con el fin de perjudicar a otros, es una violación del noveno mandamiento (Elena de White: Patriarcas y profetas, pág. 317-318).

 

“El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo” (1ª Juan 2:4-6). En base a este mandamiento tu puedes decidir de qué lado estás ¿Del lado de Cristo o del lado del enemigo?  ¿La verdad o la mentira? ¿La vida eterna o la destrucción? Dios te bendiga y extienda su escudo de protección alrededor de tu casa, tu trabajo y tus amigos. Te dé de su Espíritu para obedecer la verdad.